El diseño de este mazo fomenta una estrategia centrada en el arquetipo aristocrats, que se basa en sacrificar criaturas para generar recursos o ventajas, mientras se inflige daño indirecto.

El plan principal del mazo gira en torno a Dina como una pieza clave para transformar pequeñas ganancias de vida en daño directo a los oponentes. Cada vez que ganamos vida, su habilidad desencadena una pérdida de vida para todos nuestros enemigos, lo que convierte a este comandante en una amenaza persistente incluso en el juego temprano. Además, su habilidad de sacrificar criaturas para obtener un aumento de fuerza temporal puede ser utilizada tanto para protegerla como para presionar en situaciones de combate.

La construcción del mazo se basa en tres pilares fundamentales. Primero, se incluyen múltiples fuentes de ganancia de vida repetida, como criaturas con habilidades de drenaje, permanentes que generan vida al comienzo del turno o efectos que activan disparadores al entrar al campo de batalla. Estas cartas no solo mantienen el juego bajo control, sino que potencian constantemente la habilidad principal de Dina.

En segundo lugar, el sacrificio de criaturas es esencial para maximizar las sinergias. Se utilizan motores de sacrificio como el Comedor de carroña, el Vidente de vísceras o Yawgmoth, médico thran para activar habilidades de entrada o salida de criaturas, robar cartas y acumular recursos. Muchas de estas criaturas sacrificadas se pueden devolver al campo de batalla con cartas como Persistir o Reanimar, lo que genera un flujo constante de utilidad.

Finalmente, el mazo busca establecer combos infinitos que permitan terminar la partida rápidamente. Por ejemplo, combinaciones como el Artista de la sangre o el Degollador de Zulaport junto con Altar pirexiano y un generador de fichas infinito pueden desencadenar un daño masivo. También se incluyen piezas como Sangre exquisita y Vínculo sangriento, que pueden formar un lazo infinito con las ganancias y pérdidas de vida.

Dina, infusionista de almas, es una comandante que recompensa el juego estratégico y la construcción cuidadosa del mazo. Su capacidad para combinar presión constante con explosividad la convierte en una opción emocionante para los jugadores que disfrutan del control del campo de batalla y los finales dramáticos en partidas de Commander.